despierta entre sábanas pasadas, aún el sol no a despertado, viste su cuerpo con ropas despreocupadas, se dirige " a servir bebidas a gente adinerada" despues de su jornada, vuelve a casa a reunirse con su familia al caer la noche, mantiene contacto con alguna gente del pueblo, pero apesar de eso no comparte ningun interes en verles, mantiene una relación con una chica desde hace unos años, pero tan solo la utiliza para hacerle frente a la soledad, y así pasan los días, uno trás otro..
una mañana cualquiera, abrocha los botones de su camisa desarrapada, calza sus botas a corodones, arropa sus manos con los guantes de lana, y abriga su garganta con una bufanda añeja, en la cima de su armario atrapa la maleta de los viajes de verano, de piel marrón, en ella rellena, sus escritos, y unas cuantas plumas y avandona la casa, dejando una nota en el alfeizar de la ventana, con su elegante letra bañada en tinta, deja escrito:
" no me llenan las calles de piedra bañadas en nieve, no me llena servir bebidas a ejecutivos adinerados, no me llenan las conversaciones comprometidas con amistades viejas, no me llena besar esos labios, que muchos besaron antes, no me llenan mis escritos pues solo hablo de mis frustraciones, no me llena vivir esta farsa, pues yo no estoy echo para esto, esta ciudad me atrapa, este trabajo de esfuerzo diario, tan solo me ofrece unos cuantos peniques, no comparto interes en hablar de vidas de otras personas con gente a la que nisiquiera importo yo, no me llena compartir mi tiempo, con una persona común, que vive de la indiferencia por el mundo, anda buscando ser atractiva, y amí esta vida, no me atrae, asi que me marcho, escribiré a casa, desde allá a donde valla, llevo, conmigo mis escritos, y mis sueños, visitaré una ciudad donde los poetas caminan entre las calles, donde podré exprimir mi sueño y aprender, donde podré ser yo mismo sin ser juzgado por mis complicados pensares, me marcho, os quiero, pero yo no estoy echo para esto".
Los cristales del tren estaban húmedos y helados, el sonido del hierro en contacto con las vias, le hacia sentir que estaba haciendo lo correcto, obserbaba los campos bañados en nieve mientras escribia los versos más esperanzadores, pues solo llebaba consigo su esperanza, destino a una ciudad bohemia donde encontraría su verdadero ser..
vivía en un piso sin apenas decoración, no necesitaba grandes lujos, y había cambiado el rumbo de su vida, para conseguir su felicidad, por lo que no le importaban necesariamente los bienes materiales.. conoció a gente muy interesante, poetas, escritores, músicos.. y de todos ellos aprendió cosas que le servirian para continuar viviendo, acepto consejos desde el más sabío hasta el más inculto.. cada tarde, se reunia con una joven de cabello castaño y ojos azul cielo, disfrutaba al contemplar sus rasgos, y disfrutaba de las largas comversaciones que saboreaban durante horas, algunas tardes, paseaban a orillas del rio, sumergidos en la naturaleza, mientras hablaban acerca de sus sueños e intereses que ambos compartian, otras tardes disfrutaban de silencios mientras ambos escribian..
pero aquella tarde subió a casa, lo que ahora era su hogar, tomaron una copa sentados en unas sillas viejas que su mandre le mandó con unos cuantos ahorros, charlaron y fruto de la ilusion, fundieron sus labios en un profundo beso, la tendió en un colchón colocado en el suelo, y fué destapando su cuerpo.......
pasaban los meses, y recibia noticias de su familia, todo seguia en la rutina de siempre, algunos amigos fueron a preguntar por él varios dias a la semana, y de aquella chica con la que compartió su vida, nadie sabia nada..
.."no todo es tan perfecto, aquí donde he decidido emprender una nueva vida, los amaneceres siguen siendo iguales"..
comprendió que su sueño era irreal, los consejos de poetas, escritores y musicos, tan solo eran las formas de ver la vida de esas personas, pero no era la suya propia... no podría vivir de un sueño, los paisajes cálidos aveces le sacaban de quicio, añoraba el frio.. de echo añoraba a su familia, su cama cubierta de sábanas limpias, el olor del cuello de esa chica que no compartia sus fantasias, añoraba esa gente convencional que aportaban a su vida una rutina, una estabilidad.. alfin y al cabo todas las personas que conoció le aportaron algo, desde los mas sabios a los mas incultos..
en el tren de vuelta a casa, a su verdadera casa.. comprendió que es normal tener sueños e ilusiones, pero no podemos avandonarlo todo cuando nos agobie nuestra realidad, hizo daño a su familia, y a las personas que comprendian su vida, pero también se hizo daño así mismo.. nuestra realidad la creamos nosotros, nosotros decidimos qué queremos en nuestra vida.. nosotros decidimos quienes somos, y quienes queremos ser, porque las cosas se tuerzan, o un dia veas todos los sin sentidos.. no podemos avandonar..
realmente, creció como persona, y alimento tus libros con consejos a jovenes como él soñadores e ilusos.. porque " nos cuesta valorar, lo que se a convertido en rutina, y necesitamos ambientes nuevos y experiencias nuevas, personas misteriosas, pero esa no es la verdadera felicidad, tu felicidad está en tí"
al pie de la puerta de su acojedora y añeja casa, tomo la mano en el pomo, y dijo..
" e vuelto " .